Psicopatas, maestros en la distorsion del lenguaje

Los narcisistas y psicópatas distorsionan el lenguaje a su antojo para manipularte.

Los narcisistas tienen una gran habilidad para la comunicación; suelen ser personas con gran discurso y facilidad de palabra, y no solo con la comunicación verbal si que también son hábiles en la comunicación no verbal y es que lo necesitan para manipular a los demás, los atraen y utilizan para sacar provecho de ellos. Los estudios realizados hasta la fecha han encontrado características comunes que usan los psicópatas al comunicarse,. Aprende a detectarlos, puedes evitarte mucho dolor si aceleras si los descubres a tiempo:

¿Cómo hablan los psicópatas?

• Usan un lenguaje poco coherente y exagerado

Existen estudios que concluyen que los psicópatas tras esa apariencia de grandes oradores, usan un lenguaje menos coherente que el resto. Como dice el dicho «miente más que habla» su discurso además de tener poca coherencia, se trata de un cúmulo de mentiras y exageraciones que lo exaltan a él y todas su experiencias.

Su oratoria es fantasiosa con uso frecuente de cultismos, tecnicismos y florituras expresivas que no dejan indiferente a nadie. Lo que buscan es despistar al oyente y

• Rompen el ritmo de la comunicación a su antojo

Abuso de muletillas o sonidos de relleno como «ehm» «umm», que les sirven para cortar el ritmo de la comunicación. No suele ser debido a que el psicópata tenga que pensar o recapacitar sobre lo que quiere comunicar, sino que más bien responde a la necesidad de controlar las conversaciones y ser atendido por el resto.

• Son muy persuasivos

Son persuasivos en sus mensajes, siempre intentan llevarte a su terreno, a menudo no con argumentos sólidos sino más bien por el uso de la incansable repetición.

• Simulan emociones durante su discurso

Simulan a la perfección las emociones para influir en el oyente pero se dan menor número de expresiones faciales espontáneas durante su discurso. Son capaces de simular miedo o enfado sin levantar sospechas, y hacen lo mismo con emociones positivas como la felicidad, realmente no la sienten sólo se trata de engañar al de enfrente.

Utilizan menos palabras con carga emocional positiva y mayor uso de las palabras hostiles y negativas, y es que a demás de reflejar su sentir más íntimo también muestran la baja capacidad emocional con los demás y el gusto por el sufrimiento ajeno. Esto no se produce cuando lo que pretenden es la caza de su próxima víctima.

• Abusan de los gestos en las conversaciones con un propósito marcado

Apoyan el lenguaje verbal con gestos de manos y brazos para controlar la conversación y distraer del mensaje que están dando, y en la mayoría de ocasiones no es veraz y es engañoso. Además este movimiento de manos no es acorde con el lenguaje verbal, sólo se trata de una mera estrategia de distracción que repiten constantemente.

• Manipulan el tema de conversación

Muestran gran dominio de las conversaciones hablando de los temas que conocen y dejando de lado los que no tienen dominio. Esto tiene lógica, porque su principal objetivo es impresionar al oyente y, sobretodo, aumentar su ego más que comunicar. Aún así, dan detalles muy concretos sobre el tema que están tratando, a menudo detalles superficiales y de poco interés pero que le hace aparentar control sobre la situación expuesta.

• Se ponen como el centro de las conversaciones

Hablan en exceso de ellos y de sus necesidades básicas, sin tener en cuenta las de los demás.

Los narcisistas se escuchan a sí mismos y tan solo escuchan a los demás para obtener ideas de las que después se apropiarán y contarán como propias, a pesar de que la persona esté presente.

• Dominio de las conversaciones

Siempre hablan más que los demás, cambian de tema, interrumpen cuando los demás hablan, no escuchan al otro e intentan desviar la atención del resto de oyentes cuando ven amenazado su protagonismo. Realizan verdaderos monólogos que crean incomodidad en los participantes.Vangelisti y otros, se refieren a esta distorsión como «narcisismo conversacional» y se caracteriza por centrar de modo extremo la conversación en sí mismos, en una desproporcionado número de intervenciones que realizan en la conversación con respecto al número de participantes y en la exclusión de todo aquello que concierne a otro. Una de las manifestaciones más destacada es en un uso excesivo del pronombre personal singular “yo” frente al pronombre personal plural “nosotros”.

Suelen hablar más rápido pero más bajito que los demás y es que necesitan captar la atención de los que participan.

• Su discurso cambia cuando están de caza

Cuando un/a psicópata pretende cazar a su próxima víctima suele utilizar un lenguaje adulador, a veces en exceso, que llama la atención desde fuera, pero que parece complicadísimo detectar desde dentro cuando la persona está siendo víctima de sus redes. Entonces se dan infinitas conversaciones, en las que cuida con esmero la carga emocional de sus frases y su discurso es dirigido a hacer sentir calidez a la presa, para así poder extraer toda la información que necesita saber para manipular con mayor eficacia a  la que pronto será su presa.

• No son directos con los mensajes

Formulan mensajes imprecisos y ambiguos deliberadamente para crear en el otro confusión y después pasar reprochar. Los narcisistas no dan mensajes directos, sino que dan rodeos para que el oyente saque sus propias conclusiones y entienda lo que la persona bajo su experiencia cree que tiene que entender. Por ejemplo: nunca piden cosas directamente pero te hacen entender que es lo que necesitan y, de forma indirecta lo que quieren transmitir es la indicación de lo que tienes que hacer por ellos. Lo mismo ocurre con los conflictos, casi nunca crean un conflicto de forma directa sino que haciendo sentir culpables y con poca validez conseguirán su propósito, derrotar a la víctima y salir airosos.

Estoy segura que más de una de las distorsiones que acabo de contarte has podido identificar en la conversación de algún conocido y es que la comunicación de los psicópatas no deja indiferente a nadie.

Copyright protected by Digiprove © 2019-2020 Silvia Rodríguez